Ahora se hallaba en una larga sala decorada con alas de pelo rosa.
Había varias puertas e intentó abrirlas una tras otra.
Al comprobar que todas estaban cerradas volvió lentamente al centro de la sala. Esa sensación de encierro le provocaba una gran angustia y comenzó nerviosa a pensar en las posibilidades que tenía de salir de allí. Cerca del techo en un rincón había otra puerta bastante estrecha. Al acercarse vio que debajo de ésta en una de esas alas rosas colgaba una etiqueta que decía “Cómeme”.
Al tocar las alas comprobó que era pegajosa. Arrancó un trozo con facilidad y se lo metió en la boca, con dos dedos. Estaban hechas de azúcar como las nubes de feria. Como le parecián bastante asquerosas no siguió comiendo, pero al segundo se encontró totalmente cachonda.
Sonaba la canción deeper and deeper de algún sitio remoto...quizás en su cabeza.
Jamás en su vida se había sentido tan salida.
1 comentario:
No era de su cabeza de donde salía deeper and deeper ...
;)
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