sábado, 8 de diciembre de 2007

Tan lejos...


No se lo he dicho a nadie...
...pero puedo volar.

Puedo alzarme sobre los pensamientos mediocres,
y alejarme tanto,
tan lejos...
que dejo de ser humana.

Asciendo donde las lágrimas se cristalizan
y donde me cuesta respirar
tan lejos...
que hace mucho frio.

Porque ya no llueve
la atmósfera es densa
y las nubes están más vacías que nunca,
no sostienen ya ni sueños
ni recuerdos.


Nadie dijo que volar estuviera lleno de ventajas,
pero es que se me da mejor volar que andar.




4 comentarios:

Anónimo dijo...

Pues qué suerte, así no estaràs tan encorsetada, que andar te ata al suelo y en el suelo, puedes tropezar

Anónimo dijo...

Soy de la opinión de que volar muy alto puede resultar perjudicial. Para mi es mejor mantener los pies en el suelo, y mantener los ojos en el camino, para poder saltarse las piedras.

Anónimo dijo...

Volar es fantástico... siempre y cuando no caigas.

Por desgracia siempre hay algo o alguien que te hace caer.

MO RANSAR dijo...

que verdad tan grande y que suerte, la de poder estar en ese momento de la vida en el que quieres y puedes volar... supongo que algunos nunca olvidamos esos tironcillos estomacales, que de vez en cuando azotan más que nunca, y eso es maravilloso, pero yo aspiraria a poder volar siempre mientras sabes que tienes un nido donde dormir cada noche...
Me gusta mucho tu blog, sisi! saludos