sábado, 22 de marzo de 2008

Jugar al revés.

Mi cuerpo se dilata y se contrae. Es un cuadro abstracto e indefinido.
Hay cuerpos que desprenden calor y hay cuerpos que absorben.
Hay pieles que cambian de sabor y otras que su esencia queda pegada a ti, durante horas o segundos.
Los juegos se basan en diferentes reglas, lo importante es no seguirlas si es necesario.

Buen provecho jugadores.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

TAMPOCO SOY DE BILBAO

Libre, un folio en blanco esperando narrar grandes historias.
Pero persiste la misma sensación.
Sólo, perdido, naufrago en una gran playa de vías,
esperando que algún tren pare a recogerme.

Esperando...

Un folio en blanco que no se deja escribir,
una Alicia que no persigue al conejo,
la semilla que es devorada por la gallina.
Un folio en blanco sin inspiración.

Sin embargo comienza un cambio.

Imagino un lápiz, escribe, dibuja.
Danza libre trazando líneas,
dejándolo fluir todo.
Líneas sin sentido, ¿o no?

Recuerdo entonces un tren que pasó hace poco.
Un tren extraño, singular más bien.
Un tren normal, pero distinto.
Rodeado de cierto halo misterioso.
Conducido por... ¿XXX?
En su interior, siluetas,
moviéndose de uno a otro lado.

Quizás si me apresuro podría alcanzarlo,
quizás podría subir en él.
Algo me dice que lo intente.

Es extraño...
no sé a dónde me llevaría,
si es que me ha de llevar a algún sitio.
Quizás sea sólo un empujón para salir de esta playa,
quizás me lleve a otra estación,
quizás los personajes que en él habitan
no quieran tenerme como polizón y me devoren,
quizás me usen como condimento, o me prefieran para postre.
O quizás me inviten a comer,
no en Bilbao, no en Barcelona,
quizás una ciudad nueva.

Sea lo que sea, algo me dice "¡corre!".

Poco a poco mis pies parecen querer emprender un nuevo camino.
La playa de vias comienza a quedarse atrás,
mi paso, sin ser aún muy seguro, acelera el ritmo,
poco a poco gano velocidad.

Noto la punta de un lápiz sobre mí.
Extrañas formas se dibujan, no son aún siquiera palabras,
ya no estoy en blanco, es un comienzo.

No me canso, corro con todas mis fuerzas,
podría estar así días.

Para mi sorpresa alcanzo el tren.
Exacto a como lo recordaba.

Logro asirme a él y subirme en un pequeño saliente,
justo al lado de la puerta del último vagón.
Miro a través de una ventana, apenas distingo nada.
Siluetas corriendo, otras inmóviles,
luces, claros y sombras.

Observo la puerta.
Pienso... ¿mejor llamar? ¿o entro sin previo aviso?
Ni siquiera sé por qué he llegado aquí.
Ni siquiera sé si me abrirán, pero seamos educados.

TOC!!! TOC!!!

Anónimo dijo...

yo me quedé en:
jugar al teto...
jugar a la piragua, es igual que el teto pero bajo el agua.
bueno, jeje, supongo que habrán más juegos.
salud-saludos

menteabierta dijo...

dilatar contraer, este juego me recuerda a un parto pero intuyo que se trata de un juego mas placentero xD.

Me alegro de haberla vuelto a encontrar señorita Dita. ¿Como fue su abandono del myspace? ¿no le llenaba? :D