lunes, 4 de enero de 2010

El Plan


Hace días que te estoy regalando mis sueños.
Con alevosía y nocturnidad.

En silencio los dejo caer por el precipicio de la almohada. Llegan rodando a la comisura de tu boca, y al entrar en ella, te hacen sonreír.

Y un día me regalarás tus sueños, pensando que son tuyos, pero no serán más que los míos regurgitados.



1 comentario:

NaNa dijo...

me gusto, me gusto mucho :)
algun dia ¿no?

besos