jueves, 10 de octubre de 2019

El silencio

El silencio es MI necesidad.
Silencio como reino para corregir un mundo demencial.
Ausencia de música, de parloteos vacíos  y voces expansivas.
Reconozco que  me excito solo de pensarlo.

Mi obsesión por el silencio ha hecho que escriba más y hable menos. Ha hecho que investigue sobre él para constatar que no estoy loca ni equivocada.
El hecho de asumir el silencio por respeto hacia un lugar y una comunidad, San Benito lo llamaba conversio morum suorum.  En la adolescencia cuando tube mis  primeras crisis existenciales me plantee muy seriamente  ser monja, pero solo por la ventaja exclusiva que tienen en sus conventos con voto de silencio.

El silencio es respeto. Es no violar con tus ruidos a alguien que no los quiere escuchar.
Esa gente que ejerce su tiranía con la música, yendo a playas a relajarse con altavoz, esa gente que te pone la radio en el trabajo porque solo así se concentran ellos... esos adolescentes que gritan en un majadero descontrol hormonal.
ESA GENTE desconsiderada y soez.
El  silencio como práctica piadosa y de penitencia por todos ellos.

En la práctica yoga, el silencio es un ejercicio llamado "manobratha" con el fin de hablar menos y cuando se haga, se escojan las palabras que tengan más significado.  Reaprender a hablar, a comunicarse como es debido.
El silencio es honestidad, reconocer que no tienes nada que decir ni compartir que merezca realmente la pena, asumir que a lo mejor lo tuyo no es importante, ni siquiera interesante para los demás.
Es la coronación de la humildad.
El silencio es mi cordura y mi paz.



Resultado de imagen de silencio sanidad



1 comentario:

Gris dijo...

...Gracias...